El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha dedicado gran cantidad de fondos a promover empresas cuyos productos utilicen o se relacionen de forma directa con la innovación y la tecnología. Su visión es apoyar tecnologías o productos disruptores, es decir que su impacto social o económico sea tal que cambien la economía. Sólo en insumos naturales para medicina y para cocina gourmet, como el cacao, válido para ambas categorías, el mercado mundial es enorme y su crecimiento es la tendencia sobre todo en Asia.
Otro tema que promueve el banco es la inclusión de las comunidades indígenas en el desarrollo desde el punto de visto de su conocimiento ancestral y visión de autodesarrollo.
Esta era abre puertas a nuevas industrias y oportunidades pero hay que estar atentos, “Debemos ver la oportunidad en el consumidor, es ahí donde está el mercado, y hoy no hay fronteras para los mercados”.
Generar empleos de calidad a través de la ciencia y la tecnología, accediendo a nuevos mercados de consumo ético, que incluya a las comunidades, a los campesinos y generen cadenas de valor agregado producto de esta inclusión es parte de esta propuesta del BID.